Una historia  que nos invita a reflexionar sobre la complejidad de la
	        integración social, el  choque de culturas y la identidad femenina. Un
	        relato que nos confronta con  nuestros propios prejuicios y nos abre la
	        mente a nuevas realidades. 
	        
	    
	    Cuando Mireia se casó con Mohamed, este la invitó a  conocer a su familia y
	    su país de origen, Marruecos. Veinte años después, los  viajes que han
	    realizado entre la metrópoli de Casablanca y el duar, la  aldea de
	    los padres de Mohamed, le han revelado otra cultura y le han permitido
	    conocerse mejor a sí misma.
	
	
	    Desde la  autobiografía, la crónica familiar y el ensayo, Mireia nos guía en
	    este  recorrido por una experiencia rica y compleja, llena de comprensión y
	    afectos.  Sin dejar de subrayar las grandes diferencias entre la realidad
	    europea y la  del Magreb, aborda cuestiones como la familia, el trabajo, el
	    amor, la muerte o  la situación de las mujeres.
	
	
	    Sin azúcar es una historia luminosa, un espejo que
	    refleja  nuestras propias convicciones, prejuicios y contradicciones y que
	    nos invita a  comprender al otro. Un viaje sentimental que desafía las
	    fronteras culturales y  nos sumerge en la complejidad de la vida.